Sobre Emily in Paris en pocas palabras:

Emily en París sigue la historia de Emily, una joven estadounidense que se muda a París por trabajo y navega por los desafíos de las diferencias culturales, las barreras del idioma y el romance inesperado. Con una estética brillante y colorida, la serie explora temas de amistad, amor y crecimiento personal mientras Emily aprende a adaptarse a su nueva vida en la Ciudad de las Luces.

Conoce a los personajes de Emily en París

Emily Cooper

Emily es pura energía y optimismo, la yanqui en París que hace que todo parezca una aventura de marketing. Siempre tiene mil ideas, mil looks y mil playlists; a veces parece que duerme poco y come croissants todo el tiempo (y tal vez sea verdad). Es torpe en los momentos más encantadores —se tropieza, dice lo incorrecto— pero siempre con estilo y una sonrisa. Le encanta mezclar cultura pop con tácticas profesionales, y sí, también canta en la ducha de su apartamento diminuto.

Sylvie

Sylvie es la jefa francesa por excelencia: elegante, cortante y peligrosamente eficaz, como una mezcla de espía y editora de moda. Tiene esa calma que intimida y una sonrisa que rara vez aparece, aunque cuando aparece derriba iglesias, en el buen sentido. Se rumorea que tiene secretos y un pasado de platos rotos, pero también una lealtad extraña y profunda hacia quienes la merecen. Es sofisticada pero con un punto de vulnerabilidad escondido —no lo digas muy alto— y siempre huele a perfume caro.

Mindy

Mindy es la amiga brillante, ruidosa y absolutamente adorable que trae fiesta donde vaya. Es actriz, cantante, consejera sentimental no solicitada y chef de brunch improvisado; sus teorías sobre el amor son dramáticas pero sinceras. Tiene una risa contagiosa y un gusto por lo exagerado, pero también sorprende con sabiduría genuina en momentos random. A veces es inmadura y otras es la voz más adulta, lo que la hace impredecible y querida a la vez.

Gabriel

Gabriel es el artista sensible con mirada de poeta y manos de barista, siempre con una guitarra por si acaso. Es ligeramente melancólico, romántico sin querer y bastante idealista; se enreda en sus emociones pero siempre vuelve a la música. Hay momentos en los que se muestra fuerte y responsable, y otros en los que actúa como si tuviera 17 años otra vez —sí, contradicciones incluidas. Tiene talento, una sonrisa que confunde y una inclinación absoluta por los cafés parisinos.

Julien

Julien es el chico guapo con corazón de oro… o al menos con capas, muchas capas. Pasional, frustrado, intenso y a veces impulsivo como un huracán que viene y se va; se debate entre hacer lo correcto y seguir sus deseos egoístas. Es creativo, con un estilo desordenado que inexplicablemente funciona, y tiene esa ternura torpe que te gana. A veces es melodramático hasta que no lo es, y eso lo hace extra humano.

Camille

Camille es dulce, racional y con una paciencia admirable —también un poco tímida, pero no la subestimes. Tiene valores, una sonrisa calmada y una habilidad para mantener la compostura incluso cuando todo arde alrededor; aunque por dentro a veces arde también. Es inteligente y artística, con una sensibilidad que la hace estar en sintonía con los demás; no es de confrontaciones, pero cuando se defiende se siente real. Pequeño detalle: puede parecer indecisa pero cuando decide, lo hace con una convicción sorprendente.

Luc

Luc es el amigo práctico, un poco áspero y con un sarcasmo que se da con cuchara, pero lo necesitas en el equipo. Tiene ese aire de «estoy cansado pero me importa», y en el fondo es leal hasta decir basta, aunque niegue la ternura pública. Es eficiente, directo y con un sentido del humor seco que hiere —en el buen sentido, supongo—. Puede ser jefe y confidente, y sí, de vez en cuando tiene gustos inesperados por la música pop comercial.

Alfie

Alfie es el encanto británico con demasiada confianza para su propio bien y una sonrisa que convence. Es simpático, un poco loco, con ideas románticas a la antigua y un sentido del humor que se tropieza pero funciona. Tiene ese halo de «no sé qué quiere, pero me hace reír», y se preocupa aunque a veces parezca superficial. Fluye según la situación: un día responsable, otro día un desastre adorable —es que tiene fases.

Mathieu Cadault

Mathieu es el galán con aire bohemio y una melancolía elegante que se siente en cada gesto. Profesional, dedicado y con un rostro que no olvidás, pero con una complejidad interna que aparece en conversaciones largas a medianoche. Es tradicional en algunos aspectos y subversivo en otros, lo que lo hace intrigante y a veces difícil de leer. Tiene hábitos refinados (vino, cigarro ocasional) y una ternura que aparece cuando menos lo esperas.

Pierre Cadault

Pierre es sofisticado, un poco serio y con esa autoridad de la vieja escuela que impone respeto sin querer. Es práctico, ambicioso y con una reputación que cuidar, aunque de vez en cuando muestra un humor seco y sorprendente. Tiene un código, una familia, y un orgullo que a veces choca con la modernidad; sin embargo, sabe cuándo ceder. A veces parece insensible pero en el fondo no es tan frío como lo pintan —solo muy controlado.

Benoit

Benoit es el colega encantador, travieso y con una sonrisa de mitad pícaro mitad amigo de confianza. Es informal, le gusta bromear y tiene esa habilidad de romper tensiones con una frase desafortunada pero efectiva. Es honesto hasta ser brutal, lo que a veces duele pero suele terminar bien; además, tiene manías curiosas, como coleccionar cucharitas de viajes. A pesar de todo, es el tipo al que le confiarías un secreto… probablemente después de una copa.