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¿Qué personaje de ‘Killjoys’ eres?

¿Eres un rebelde como Dutch, un genio de la tecnología como Johnny o un estoico como D'avin? ¡Descubre qué personaje de Killjoys encarnas con nuestro divertido cuestionario! Haz clic en el botón de inicio a continuación para comenzar y descubrir tu verdadera identidad de Killjoys.

Bienvenido al cuestionario: ¿Qué personaje de Killjoys eres?

Sobre Killjoys en pocas palabras:

Killjoys es una serie de ciencia ficción ambientada en un sistema planetario distante donde los cazadores de recompensas conocidos como «killjoys» persiguen a criminales peligrosos. El programa sigue a un trío de killjoys: Dutch, Johnny y D’avin, mientras navegan por la política intergaláctica y las luchas personales mientras intentan cumplir sus misiones. La serie es conocida por su ingenioso diálogo, escenas de lucha llenas de acción y construcción de mundos intrincada.

Conoce a los personajes de Killjoys

Dutch

Dutch es puro fuego y liderazgo frío, la clase de persona que te salva la vida y luego te mira como si fuera lo más normal del mundo. Tiene una brújula moral rara y feroz, y a veces parece que su corazón está blindado pero luego hace algo ridículamente suave que te derrite; no tiene sentido, ¿verdad? Habla con pocas palabras pero carga con toneladas de historia; la ves en el ojo, en la cicatriz, en cómo aprieta el arma — y sí, probablemente guarda un recuerdo tonto en el bolsillo porque es humana aunque odie admitirlo. Ah, y detesta que la llamen “jefa” pero secretamente lo disfruta, shhh.

Johnny Jaqobis

Johnny es el caos encantador en persona: genio mecánico, mano rápida y sonrisa que te hace creer que todo va a salir bien incluso cuando no tiene idea (o eso dice). Es gracioso, hiperactivo, con manías raras — colecciona tuercas? ama los trucos improvisados? — y a la vez increíblemente leal, un amigo que cruza el sistema solar por ti. Se mete en líos por impulso y luego improvisa soluciones imposibles que funcionan, o al menos funcionan a su manera, que es caótica pero efectiva. Tiene un corazón grande y melancólico escondido tras sus bromas; a veces se pone serio y te sorprende, como si tuviera otra capa secreta.

D’avin Jaqobis

D’avin es la roca: serio, profesional, protector hasta la médula, y con un código que no negocia — aunque de vez en cuando lo veas perdiendo la paciencia por una tontería y eso te hace reír. Exmilitar, de principios claros, pero también tiene una vena muy humana, a veces le sale el sentido del humor seco y otras veces cocina cosas raras que nadie le pidió (sí, cocina). Es el tipo que pone orden en el caos y luego se preocupa en silencio por su gente; tiene cara de no emocionarse pero llora con las películas (o eso juraría alguien). A veces parece demasiado formal y otras veces es sorprendentemente tonto con su hermano, cliché pero tierno.

Lucy

Lucy es misterio con tacones de combate; fría, letal, hipercompetente y con un pasado en capas que te mueres por rascar. Tiene una presencia magnética y una voz que corta, pero también momentos de humor negro y sarcasmo que la hacen adorablemente insoportable; en fin, puro magnetismo. Hacker, contrabandista, whatever — inteligente hasta el hueso y no confía en nadie, excepto en las personas que quizá ni sabe que quiere proteger; contradicciones, siempre. Ah, y guarda playlists rarísimas — desde baladas tristes hasta techno industrial — lo cual la hace mucho más humana, aunque ella lo niegue rotundamente.

Pree

Pree es la fría operativa calculadora que parece salida de un manual y a la vez tiene manías extrañas como coleccionar post-its o hablar con plantas (no pregunta por qué, sólo lo hace). Metódica, eficiente y un poquito aterradora cuando se enfoca, pero con un sentido del humor seco que aparece en los momentos más raros — un sarcasmo letal. Parece que todo es plan y orden, pero de vez en cuando entra en contradicción: muy rígida en trabajo y totalmente desordenada en lo personal, y eso la hace curiosamente simpática. No revela mucho, pero cuando lo hace, esos fragmentos son puñales de verdad; a mí me encanta, es como un puzzle que nunca terminas.