Sobre The Blacklist en pocas palabras:

«La lista negra» es una emocionante serie de televisión que sigue la historia de Raymond «Red» Reddington, un ex agente del gobierno convertido en un criminal de alto perfil que se entrega voluntariamente al FBI. Reddington ofrece su conocimiento y ayuda para capturar a criminales notorios, pero con una condición: solo trabajará con la novata Elizabeth Keen. Mientras la pareja navega por una compleja red de espionaje internacional, intrigas políticas y venganzas personales, descubren sorprendentes secretos que se relacionan con el misterioso pasado de Keen y los enigmáticos motivos de Reddington. Con cada episodio, la serie ofrece intensa acción, giros argumentales llenos de suspenso y una profunda exploración de las intrincadas relaciones entre los personajes. «La lista negra» mantiene a los espectadores al borde de sus asientos, adivinando y desentrañando la verdad detrás del intrincado rompecabezas que es la lista negra de Reddington.

Conoce a los personajes de The Blacklist

Raymond Reddington

Reddington es un enigma con traje caro y sombrero, un cerebro criminal envuelto en sarcasmo y encanto — es imposible no mirarlo. Tiene un código propio y una habilidad casi cómica para aparecer justo cuando nadie lo espera; además, cuenta historias como si fueran artefactos antiguos que colecciona (literalmente colecciona cosas raras, creo que conchas, no lo juro). Es carismático hasta el punto de manipular la verdad con una sonrisa, pero te salva la vida y luego te da un consejo de cocina, sí, lo juro. A veces parece un padre, a veces un villano, y eso es exactamente lo que lo hace fascinante.

Elizabeth Keen

Liz es una mezcla de nervios y acero, una agente que camina siempre al borde de descubrirse a sí misma — confusa, valiente y a veces terriblemente impulsiva. Tiene instinto de detective, memoria rápida y una capacidad casi infantil para obsesionarse con un misterio (y sí, también se le cae el lápiz todo el tiempo cuando está pensando). Quiere justicia pero a menudo se pierde en las sombras de su pasado; es vulnerable y peligrosa al mismo tiempo, lo que la hace exquisitamente humana. Es de las que te regala una mirada que te dice tanto y luego niega todo con una taza de café derramada.

Mr. Kaplan

Mr. Kaplan es la persona que limpia el desastre con una sonrisa fría: meticulosa, leal a sus principios y, no me extrañaría, fanática de las listas. Tiene manos hábiles para resolver problemas (literalmente sabe cómo hacer desaparecer pruebas) y una moral a su manera — maternal pero sin dulzura fácil, más bien una dureza que protege. A veces se comporta como una abuela que te friega la cara con verdades; otras, como una asesina eficiente que planifica hasta la última servilleta. Pequeño detalle: insiste en que el orden salva almas, pero también guarda fotos viejas en cajas que ya no recuerda del todo.

Dembe

Dembe es la calma personificada, leal hasta la médula y con una paciencia que rozaría la santidad si no fuera por lo letal que puede ser cuando se enfada. Es el corazón silencioso de la operación — escucha más de lo que habla, recuerda mejor que cualquiera y tiene un sentido de la justicia que no necesita fanfarrias. Suele sonreír con los ojos y, sorpresa, cocina un guiso raro que todos aman pero nadie puede replicar. A veces habla como un monje, otras hace chistes muy malos; ese contraste lo hace misteriosamente adorable.

Aram

Aram es el nerd adorable con gafas, trenzas de ideas y una mente que arregla cualquier cosa con cables y cariño; técnico por fuera, poeta por dentro (bueno, no tan poeta, pero sí romántico a su manera). Tiene ansiedad social, una taza de dinosaurio perpetua y una propensión a decir algo inesperadamente honesto cuando menos se espera. Le teme a las bombas emocionales casi tanto como a las reales, y se aferra a los amigos como si fueran su firewall personal. Es torpe, brillante, y con suerte siempre a mano para desactivar una crisis — o para añadir un gif en el momento menos oportuno.

Katarina Rostova

Katarina es un huracán: espía, madre complicada y mito viviente con más identidades que vestidos en un baúl. Inteligente, manipuladora y profundamente contradictoria — puede ser tierna en una carta y fría en el mismo sobre — y luego se va a beber té ruso como si nada. Tiene un pasado entretejido de secretos y talento para desapareces; es hermosa en su caos y aterradora en su claridad, lo que la hace inolvidable. Ah, y probablemente tiene un perfume que sugiere peligro; eso lo digo con seguridad vaga.

Ressler

Ressler es el agente de línea dura, por el libro pero con un corazón que a veces se le escapa por la rendija del traje; orden, disciplina y una furia contenida que asusta pero también protege. Odia las trampas morales… hasta que las usa, sí, hay contradicción ahí y por eso es creíble. Tiene una risa que sale raro cuando baja la guardia y gustos culpables tipo música pop que nadie esperaría (lo juro, lo he visto tararear). Es terco, leal y de esos que nunca abandonan la escena hasta sacar la verdad, aunque eso le cueste noches de insomnio.

Samar

Samar es dura, directa y con un sarcasmo que corta como cuchillo; ex-Mossad, ahora en la mezcla con habilidades que asustan y un código personal bastante firme. No es de muchas palabras pero cuando habla te indica la ruta más sensata, y su precisión es casi artística — además, maneja armas y conversaciones incómodas con la misma facilidad. Tiene un lado sensible que sale rara vez (cuando come comida picante o escucha una canción triste a todo volumen), y a veces se permite bromear de forma inesperada. Es feroz, inteligente y sorprendentemente protectora con los suyos, aunque lo niegue con un gesto brusco.