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¿Qué personaje de ‘Banshee’ eres?

¿Alguna vez te has preguntado qué personaje de la exitosa serie de televisión Banshee te pareces más? ¡Bueno, no te preguntes más! Toma nuestro divertido y emocionante cuestionario para descubrir qué personaje te pareces más. ¿Eres el intrépido y astuto Lucas Hood, el calculador y despiadado Kai Proctor, o el amable y leal Sugar Bates? Haz clic en el botón de inicio a continuación para comenzar el cuestionario y descubrir tu contraparte de personaje de Banshee.

Bienvenido al cuestionario: ¿Qué personaje de Banshee eres?

Sobre Banshee en pocas palabras:

Banshee es una serie de televisión estadounidense de drama criminal que sigue la historia de Lucas Hood, un ex convicto y ladrón maestro que asume la identidad del recién nombrado sheriff de Banshee, Pensilvania. La serie explora el lado oscuro y violento de la ciudad mientras el pasado criminal de Hood lo alcanza y se encuentra envuelto en un mundo de drogas, corrupción y crimen organizado. Con un elenco talentoso y una trama intensa, Banshee es una serie imprescindible para los fanáticos del género criminal.

Conoce a los personajes de Banshee

Lucas Hood

¡Lucas Hood es el tipo que quieras que entre por la puerta cuando todo va mal! Exconvicto convertido en sheriff, siempre con una verdad a medias y una pistola lista, pero también con un sentido del humor torcido que aparece en los peores momentos (sí, a veces cuenta chistes malos). Es moralmente flexible: hace lo que hay que hacer aunque le duela, y luego se sentará a comer pancakes como si nada (o eso dice). A veces parece calmado y calculador, y otras veces grita como si nadie le importara, lo cual es parte de su encanto caótico.

Carrie Hopewell

Carrie es fría, brillante y letal, pero también una mamá que guarda dibujos en el bolsillo de su chaqueta (sí, ¡qué contraste!). Espía retirada con un pasado en la que la puntualidad y las listas son religión, aunque curiosamente siempre olvida dónde dejó las llaves. Tiene una precisión quirúrgica para manipular situaciones y personas, pero se le escapan momentos de ternura que la hacen humana —y a veces indecisa—. En resumen: metódica, traumatizada, eficiente… y sorprendentemente hogareña cuando la dejas respirar.

Kai Proctor

Kai es el patriarca del pueblo, elegante, severo y con un gusto terrible por la actuación teatral (le encanta un buen discurso, aunque lo rompa con violencia). Ama su “familia” y sus tierras, pero no dudes en cruzarlo porque te machaca con la misma cortesía con la que te invita al té; es un maestro de las contradicciones. Tiene un código de honor retorcido y una sonrisa que miente mucho; es como un terrateniente salido de un cuento oscuro. A veces da la impresión de que colecciona pequeñas vergüenzas del pasado (no sé si es verdad, pero juraría que guarda una cadenita oxidada en el sótano).

Sugar Bates

Sugar es un torbellino adorable con un pasado criminal y una voz que te derrite, mitad amigo leal, mitad navaja afilada cuando toca. Es juguetón, sarcástico y sorprendentemente tierno con los débiles; también fuma demasiado y canta canciones tristes en momentos inapropiados. Tiene un instinto casi paternal para proteger a los que quiere, aunque proclame lo contrario y diga que “no le importas” con cara de puro drama. Y sí, a veces se comporta como un payaso, y justo cuando crees que es superficial, te sorprende con un detalle profundamente humano.

Deputy Brock Lotus

Brock tiene esa mezcla de ingenuidad y empeño que te hace querer gritarle “sí, por favor, piensa antes”, pero aun así lo admiras. Es el tipo de ley y orden, se toma los reglamentos en serio… salvo cuando rompe una norma por impulso (hipocresía tierna). Es fiel, torpe a veces, y con una honestidad incómoda: dirá lo que piensa aunque no deba, y luego lamentará haberlo dicho diez veces. Tiene hobbies raros que a nadie le importan pero a él sí (modelos, sellos, quién sabe), y en el fondo es más valiente de lo que aparenta.

Job

Job es gigante, callado y tiene una paciencia que asusta; parece simple pero sabe más de lo que cuenta y cuando habla, pesa. Es el músculo con una filosofía propia; te parte la mandíbula y luego te ofrece consejo paternal, supongo que es su estilo. Ama hacer cosas manuales (maderas, reparaciones, esas manos tienen historia) y es sorprendentemente dulce con niños o animales, lo cual desarma. A veces parece monolítico e impenetrable, y otras veces cuenta historias ridículas que nadie esperaba —es contradictorio y perfecto por ello.

Deva Hopewell

Deva es fuego y hielo a la vez: adolescente traumatizada, inteligente y con una independencia que asusta (además, hace cara de saberlo todo, aunque en realidad no). Tiene un talento para hacer observaciones agudas y herir sin querer; es artística, callada a veces, explosiva otras, y siempre intensa. Se preocupa mucho por la familia pero guarda secretos como si fueran joyas, y de vez en cuando actúa como una adulta mayor que olvidó cómo ser niña. Y sí, toca algo musicalmente (¿viola? ¿guitarra?), o al menos eso creo, porque la imagen cambia según el capítulo.

Rebecca Bowman

Rebecca es misteriosa, devota hasta el fondo y tu peor pesadilla envuelta en encaje (o algo así dramático). Es religiosa, manipuladora y sorprendentemente frágil por dentro; tiene esa mirada de «sé más de lo que digo» y eso da miedo. Es capaz de fe sincera y de decisiones escalofriantes en segundos, y su lealtad es peligrosa porque no siempre es lógica. A veces parece poseída por convicciones y otras veces simplemente parece una chica insegura que no sabe cómo encajar, lo que la hace incómodamente humana.