Sobre Dark en pocas palabras:

Dark es una serie de ciencia ficción alemana que sigue las vidas de varias familias que viven en el pequeño pueblo de Winden mientras descubren un misterio siniestro que abarca generaciones. Cuando dos niños desaparecen, su desaparición revela secretos que unen el pasado, presente y futuro. La compleja trama, la intrincada trama y los elementos de viaje en el tiempo de la serie han cautivado a las audiencias de todo el mundo, convirtiéndola en una obligación para los fanáticos de la ciencia ficción.

Conoce a los personajes de Dark

Jonas Kahnwald

Jonas es ese chico atormentado que siempre parece cargar con el peso de todos los relojes del mundo, serio pero con una vulnerabilidad que te parte el corazón. Tiene una determinación fría cuando se trata de arreglar cosas (o al menos intentarlo), y a la vez se tropieza con sus propios intentos una y otra vez — muy humano, muy frustrante. A veces se siente como el héroe trágico y otras como un adolescente perdido que no sabe qué camisa ponerse; sí, contradicciones por todas partes y me encanta. Ah, y tiene cara de haber pensado demasiado en todo y de romper un par de cosas sin querer (literal y emocionalmente).

Charlotte Doppler

Charlotte es la científica que parece tener siempre una teoría en la manga y un secreto en la mirada, maternal pero distante a ratos, muy curiosa (obsesiva, digamos). Le encanta explicar las cosas con precisión, pero cuando la vida le lanza paradojas personales se le ve perdida, y eso la hace aún más real. Es increíblemente profesional y, a la vez, protectora hasta el extremo — a veces fría, a veces cálida, como un termómetro que no sabes si leer. También tiene pequeños hábitos raros que nadie espera (yo recuerdo que colecciona bolígrafos, o era tazas? no sé, algo así).

Martha Nielsen

Martha es fuego y misterio: segura, enigmática, capaz de ser dulce y cruel en la misma conversación; sí, la chica que complica todo. En algunas versiones del universo es la salvación y en otras la chispa del problema, y eso es exactamente lo que la hace fascinante. Tiene una lealtad bastante caprichosa — ama con fuerza pero también toma decisiones que te hacen querer gritar—, y hay algo trágico en su sonrisa que nunca desaparece. A veces parece que nunca duerme y otras que vive en un mundo paralelo (tal vez porque, eh, literalmente).

Hannah Kahnwald

Hannah es una mezcla de contradicciones: ferozmente independiente, pero también herida y un poco manipuladora cuando siente que no la ven. Tiene un ingenio ácido que dispara en momentos inesperados, y una ternura escondida que te sorprende si te acercas (aunque cuidado, que muerde). Vive sus propias reglas y a veces toma atajos morales que te dejan pensando si la odias o la entiendes — probablemente ambas cosas. Y sí, a veces parece súper práctica (o fría), y otras veces explota en un drama que nadie pidió.

Peter Doppler

Peter da esa impresión de tipo serio, formal, con gafas y una colección de secretos que nadie sacó a la luz todavía. Es reservado, profesional (psiquiatra, sí), y tiene una paciencia que a veces raya en lo inquietante; amablemente distante, podría decirse. Hay momentos en los que actúa como el ancla racional del grupo y otros en los que su pasado lo empuja a hacer cosas raras — no siempre coherente, lo que lo hace humano. Pequeño detalle raro: a veces parece olvidadizo con las llaves, pero nunca con sus propias contradicciones internas.

Katharina Nielsen

Katharina es la madre luchadora, la mujer que no se deja pisar y que a la vez carga con culpa tras culpa (intensa, imparable y muy real). Tiene una fortaleza admirable, pero también una tendencia a chocar con la vida de frente — tipo martillo, no guante de seda—, y eso la hace imperfectamente valiente. Puedes verla como heroína doméstica o como alguien que perdió el rumbo por amar demasiado; ambas son ciertas. Además tiene un humor seco que aparece cuando menos te lo esperas (y sí, a veces llora en el baño, totalmente coherente).

The Stranger

The Stranger es misterio puro: habla poco, hace mucho y camina como si supiera algo que tú no puedes ni imaginar. Es enigmático, persistente, medio torpe con las explicaciones y sorprendentemente emotivo si lo pillas en el momento justo. Tiene esa vibra de “no confíes, pero escucha” y mezcla decisiones valientes con errores que parecen dictados por el destino (o por el estrés temporal). Y por supuesto, guarda secretos que lo vuelven irresistible y desesperante a la vez — como quien cambia de camisa pero no de culpa.

Bartosz Tiedemann

Bartosz es el amigo que te cae bien aunque haga cosas raras y a veces traicione sin querer (o sí), muy entretenido ese tipo. Es encantador, un poco inseguro, con momentos de astucia y otros de total despiste; se le nota la lucha interna entre lo que quiere y lo que cree que debe hacer. Tiene una curiosidad juvenil que choca con decisiones muy adultas, lo que lo convierte en un personaje imprevisible y simpático. Y sí, a veces toca la guitarra o algo así, o sólo finge saber tocar, no me juzguen.

Magnus Nielsen

Magnus es el amigo leal, ese que intenta mantener todo en pie y que tiene una paciencia que admiras hasta que no la tienes (muy humano). Es protector, sensible en un plan discreto, con un humor que aparece en el momento menos serio para salvar la escena. Tiene sueños simples pero importantes, y aunque parezca el “tipo normal” también carga con sus propias sombras y decisiones impulsivas. Pequeño detalle: siempre parece saber dónde están las bicicletas — o al menos eso cree él.

Ulrich Nielsen

Ulrich es fuerza bruta mezclada con desesperación, el padre que actúa primero y piensa después (y a veces eso sale mal, muy mal). Es protector hasta el exceso, impulsivo, con un orgullo que complica todo y una tristeza detrás de la furia que te rompe. Tiene errores enormes, pero también actos de amor que son torpes y sinceros, una combinación trágica. Ah, y de vez en cuando parece que vive enojado con el mundo, aunque también tararea canciones viejas cuando nadie mira.