Sobre Justified en pocas palabras:

Justified es una serie de televisión estadounidense de drama criminal que se emitió en FX desde 2010 hasta 2015. El programa sigue al Marshal de EE. UU. Raylan Givens, interpretado por Timothy Olyphant, mientras navega por el mundo criminal del condado de Harlan, Kentucky. Basado en un cuento de Elmore Leonard, Justified presenta una mezcla de acción, suspenso y humor oscuro que mantiene a los espectadores al borde de sus asientos. La serie ha sido elogiada por su sólida escritura y actuaciones, lo que la convierte en una visita obligada para los fanáticos del género.

Conoce a los personajes de Justified

Raylan Givens

Raylan es ese tipo delgado con sombrero que parece salido de un western moderno y, de verdad, camina como si el suelo fuera suyo. Es rápido con la pistola, más rápido con los comentarios sarcásticos, y tiene un código moral medio torcido que solo él entiende — a veces es rígido, a veces se salta las reglas con una sonrisa. Le gustan los bourbons amargos y las camisas de franela, aunque jura que no le van las comidas pesadas (mentira, come costillas a las tres de la mañana). Siempre parece cansado y al mismo tiempo concentradísimo; es el héroe que no quiere ser héroe y eso lo hace imposible de olvidar.

Art Mullen

Art es el jefe de la oficina, el tipo serio con voz de reproche que en realidad te cuida aunque no lo diga en voz alta. Le cae mal el caos, adora el papeleo y mantiene una calma burocrática que funciona como un ancla para todos — pero ojo, se le enciende el temperamento cuando meten la pata de verdad. Tiene un sentido del deber muy viejo estilo y una debilidad absurda por los regalos malos que sus policías le traen (los guarda en un cajón, ahí están, como reliquias). Es el confidente que parecería aburrido en una fiesta y, curiosamente, suele tener el mejor chiste al final.

Ava Crowder

Ava es puro nervio controlado: fría cuando tiene que serlo, feroz cuando la apuras, y con una paciencia que en realidad es pura estrategia. Ha pasado de víctima a jugadora experta en un tablero lleno de hombres peligrosos, y su lealtad es una moneda que guarda con cuidado; te la da o te la quita en un suspiro. A veces parece que cualquier cosa la hace llorar y al minuto siguiente está cortando leña como si nada; esa mezcla la hace impredecible y poderosa. Tiene gustos domésticos raros para alguien que hace planes oscuros (se la imagina escondiendo galletas en el bolsillo) y eso la humaniza un montón.

Tim Gutterson

Tim es el compañero silencioso, el francotirador con cara de no creer lo que ve y, sin embargo, con una precisión matemática en todo lo que toca. Es calmado hasta en las peores situaciones, habla poco, pero cuando lo hace sueltan perlas que nadie esperaba; parece distante pero cuida a la gente como si fueran su familia. Tiene traumas (sí), duerme poco y a la vez tiene manías curiosas, como coleccionar herramientas pequeñas o saber siempre la hora exacta. Es la clase de personaje al que le confías cosas porque no las vomita por ahí, pese a su humor seco y a sus bromas raras que salen cuando menos.

Rachel Brooks

Rachel es la fiscala lista y directa que no se corta y que sabe moverse en un mundo de hombres sin hacerse la víctima. Profesional hasta los huesos, ambiciosa, con una ética que a veces la obliga a elegir caminos difíciles; es práctica, pero tiene un corazón más grande del que admitirá en público. Le encanta llevar todo ordenado (literalmente su escritorio es terroríficamente limpio) y también tiene un humor que aparece en chispazos, como cuando suelta una frase punzante que corta la tensión. Es el tipo de mujer que hace las cuentas fríamente y después se sorprende de sentir algo — no muy consistente, pero honesto.

Boyd Crowder

Boyd es el anti-héroe perfecto: carismático, peligroso, con discursos que suenan a filosofía barata pero funcionan, y una ambición que da miedo. Fue predicador, fue obsesión, y ahora es un tipo que mezcla planes criminales con metáforas poéticas; tiene una lealtad retorcida hacia su gente y un gusto por los riesgos que raya en lo artístico. Es capaz de ser encantador y después hacer algo que te rompe el alma; curiosamente, es tierno con los niños o con ciertos objetos (colecciona cosas viejas, no sé por qué) y brutal con los enemigos. Lo mejor es que nunca sabes si lo amas o lo odias, y eso lo vuelve magnético y peligroso a partes iguales.