Sobre 1883 en pocas palabras:

1883 es una serie precuela del popular programa «Yellowstone», que sigue a la familia Dutton mientras viajan por los Estados Unidos en el siglo XIX. La serie muestra las luchas y desafíos de la familia mientras navegan por una tierra agreste y sin ley, encontrando nuevos personajes en el camino. Es un relato de supervivencia, amor y familia, ambientado en el salvaje oeste de América.

Conoce a los personajes de 1883

Shea Brennan

Shea es ese tipo de vaquero que llegas a querer aunque te deje con el corazón encogido, un guía duro por fuera y con heridas por dentro. Terco, moralmente firme pero cansado, siempre parece estar cargando mil historias que nunca termina de contar (y a veces tararea viejas canciones militares, ¿o me lo imagino?). Es el protector práctico del grupo, el que toma decisiones difíciles y luego se queda en silencio mirando el horizonte. Tiene un humor seco y un gesto suave cuando menos lo esperas, aunque alguna vez jura que odia los abrazos y luego te salva sin pensarlo dos veces.

James Dutton

James tiene esa presencia de patriarca silencioso, serio como una roca y con una idea enorme de lo que es cuidar de los tuyos. Gobernante por necesidad más que por gloria, lidera con responsabilidad y a veces con demasiado peso sobre los hombros; da la sensación de que piensa todo tres veces antes de hablar. Es protector, terco y absolutamente leal, el tipo que pondría su vida en la balanza por su familia sin pestañear. Y aun así, hay pequeños gestos—una risa rara, un poema susurrado—que te recuerdan que no es solo una estatua imponente sino alguien que siente mucho.

Margaret Dutton

Margaret es como un fuego contenido: madre feroz y sensible a la vez, la que cose, la que reza, la que monta si hace falta (creo que monta… o tal vez nunca aprendió? en fin). Tiene una fortaleza que asusta y un cariño que ablanda hasta al más duro, manda con mirada y con manos y a veces con una frase que te deja pensando. Es protectora hasta la médula, muy práctica en las desgracias pero también capaz de momentos de ternura inesperada, casi melodramáticos de lo bonitos que son. Y sí, te juro que una vez le vi llorar de risa por algo ridículo, simplemente humana y maravillosa.

Elsa

Elsa es la chispa, la narradora silenciosa que guarda preguntas en la garganta y estrellas en los bolsillos; a veces parece una niña y otras una vieja alma—todo a la vez. Curiosa, valiente y con una sensibilidad feroz, escribe y observa y se cree pequeños secretos que nadie más entiende; hay una nostalgia precoz en ella que te rompe. Tiene momentos luminosos de alegría contagiosa y luego se eclipsa con decisiones complicadas; definitivamente hace lo que siente, aunque improvise. Y sí, tiene un collarito raro que no sé si es de su madre o de un amante pasajero, lo cual estoy casi segura de que significa algo importante.

Thomas

Thomas es ese tipo misterioso, un hombre con un pasado que pesa y con miradas que cuentan historias sin palabras; serio, competente y un poco distante. Es el caballo fiel del grupo en el sentido de que hace lo suyo, sin mucha fanfarria, pero cuando las cosas se ponen feas aparece y resuelve. Tiene códigos propios, es observador y a veces se muestra sorprendentemente tierno (y otras veces un cascarrabias, depende del día). Y sí, juraría que colecciona pipas o botones o algo así—pequeñas cosas que no pegan con su cara de tipo duro y por eso me encanta.

Josef

Josef es el inmigrante soñador con la risa nerviosa que te roba el corazón; siempre tratando de encontrar un lugar, con historias de casa que mezcla en cuentos medio inventados. Amable, torpe en ocasiones (se tropieza con su propio valor) y con una fe enorme en las pequeñas posibilidades, busca seguridad y algo parecido a un hogar. Es el alivio cómico muchas veces, pero también tiene capas y momentos de una dignidad triste que te agarran. Ah, y jura que sabe cocinar algo tradicional que nadie ha probado todavía; lo cual me intriga y me da confianza a medias.

Ennis

Ennis es el muchacho sencillo, buen trabajador y con un corazón enorme escondido bajo un exterior callado; leal hasta la médula, amigo que no falla. Callado, observador, de esos que mira y anota mentalmente todo, pero cuando habla vale lo que dice; además, tiene un sentido de la justicia que lo mete en líos, a veces sin querer. Tiene vulnerabilidades inocentes (se pone nervioso con las chicas y colecciona botones—bueno eso dicen, no sé si verdad), y esa mezcla lo hace entrañable. En fin, es el tipo en quien confiarías para cruzar el río y luego compartir una historia al fuego.

Wade

Wade es el encanto ruidoso y un poco descarado del campamento, el que cuenta chistes malos y te hace reír justo cuando piensas que todo está perdido. Es un tipo arriesgado, un poco jugador, con una sonrisa que promete aventuras y problemas en la misma medida; te cae bien aunque no siempre sea fiable. Por otro lado, tiene momentos de sorprendente seriedad y hasta ternura, así que no es sólo fachada — creo que tiene un pasado que lo persigue, o eso me contó en una noche de cerveza (o me lo inventé, soy pésimo para recordar). Y sí, afirma que odia las reglas pero siempre aparece para ayudar cuando importa, contradicción adorada.