Sobre Netflix’s Resident Evil en pocas palabras:

Resident Evil es una serie de televisión original de Netflix basada en la popular franquicia de videojuegos de terror de supervivencia del mismo nombre. El programa sigue a un grupo de sobrevivientes mientras navegan en un mundo invadido por zombies y una siniestra corporación conocida como Umbrella. La serie es conocida por su emocionante acción, intenso horror y personajes queridos del juego.

Conoce a los personajes de Resident Evil en Netflix

Richard Baxter

Richard Baxter es el líder rudo que toma decisiones difíciles con voz de grava y cara de pocos amigos, pero que secretamente tiene un playlist de baladas que nadie se imagina. Protector hasta lo obsesivo, viene de un pasado jodido que lo hizo duro pero también lo volvió leal hasta la médula (sí, lloró una vez por una radio rota, literal). A veces actúa frío y calculador, otras veces tararea canciones de cuna mientras arregla equipo, lo que confunde a todos, incluido él mismo. Hace cosas moralmente dudosas cuando cree que no hay otra opción y eso lo hace fascinante y medio desesperante; lo quieres y lo odias a la vez.

Wesker

Wesker es el villano elegante que te mira como si supiera el final de todo y, spoiler, probablemente lo sabe; es frío, exacto y escalofriantemente calculador. Manipulador de primera, siempre tiene un plan maestro y la paciencia de alguien que juega ajedrez con la humanidad. Ama el control, la ciencia y los lentes oscuros (clásico), pero de vez en cuando suelta una frase cursi que te hace dudar de si también colecciona postales. Su presencia cambia el clima de la escena: cuando aparece el aire se vuelve más denso y tú quieres correr, pero también mirar, no sé, es contradictorio.

Angel Rubio

Ángel Rubio es esa chispa joven que saca carcajadas en medio del apocalipsis, impulsiva, loca y peligrosamente adorable; siempre tiene un comentario ácido listo. Es valiente hasta lo imprudente, súper leal y con una capacidad para meterse en líos que es casi artística (en serio). Siempre lleva algo pequeño consigo —una moneda, un colgante, un juguete medio roto— que no sabes por qué guarda, y le tiene miedo a la oscuridad pero es la primera que se ofrece para vigilar de noche. A veces hace cosas que te hacen gritar «¿qué haces?!» y luego te sorprende siendo la heroína inesperada.

Bert

Bert es el gruñón práctico del grupo: exmilitar, sabe de armas, motores y cómo arreglar lo que nadie más puede, con un sarcasmo afilado como cuchillo. Parece el clásico soldado duro, siempre con una cerveza (o eso dice) y una solución técnica para todo, pero jura que ya dejó el alcohol —cosa que no siempre se cumple—. Tiene un humor seco, dibuja smileys en mapas y a veces escribe notas ridículas en sus cosas, lo cual es raro pero entrañable. Y ojo, debajo del casco de tipo rudo hay un unexpectedly soft spot: colecciona cactus o lee novelas románticas a escondidas; lo peor y lo mejor.

Simon

Simon es el chico sensible y nerd que piensa antes de pegarse el tiro, siempre con la cabeza en circuitos y en cómo arreglar la tecnología del apocalipsis. Es torpe en lo social pero brillante en lo práctico, el típico que te saca de un apuro con un invento improvisado y una resignación adorable. Colecciona figuritas de dinosaurios o juguetes viejos (no sé cuándo lo dijo, pero lo vi), y tiene una calma que funciona como ancla cuando todo arde. A veces parece melancólico, otras veces te sorprende siendo valiente hasta el punto de olvidarse de respirar; es contradicción pura y, honestamente, adorable.

Billie

Billie es la chica dura, sarcástica y con un pasado que la dejaron cerrada en banda; no te fíes de su sonrisa porque guarda espinas. Es ferozmente protectora y la primera en lanzarse a la bronca, aunque luego lo niegue con orgullo y mal humor; líder natural a regañadientes. Tiene tatuajes, una risa que te hace girar la cabeza y una planta en una maceta que cuida como si fuera su hija (sí, en medio del caos), y eso la humaniza muchísimo. A ratos parece querer desaparecer del mundo y a ratos es el corazón del equipo; impredecible y real, como cualquiera que de verdad importa.

Jade

Jade Wesker es la protagonista imparable: fuerte, cabezota y con un instinto de supervivencia tan fino que te deja sin aliento; no pide permiso para ser badass. Protege a su familia a muerte, pero tiene inseguridades debajo de esa coraza que la hacen súper cercana (y trágica, a veces). Corre, pelea y actúa de forma que te preguntas si hace parkour por hobbie; además colecciona conchas (sí, conchas) y tiene una cicatriz pequeña que todos notan aunque ella se haga la despreocupada. Puede explotar en furia o quedarse en silencio pensando, y ambas versiones son igual de potentes y temibles.

Evelyn

Evelyn es la enigma personificada: a la vez tierna y aterradora, esa presencia pequeña que cambia por completo la energía de una escena. Tiene habilidades o una inteligencia que asusta —a veces actúa como niña normal que quiere jugar y otras veces provoca caos sin pestañear (cómo, no sé). Le gustan las canciones de cuna y los cajones musicales pero también parece capaz de deshacer planes enteros con una mirada, lo que es desconcertante y fascinante. Es el tipo de personaje que te hace dudar si abrazarla o correr; esa ambivalencia es su fuerza y su peligro.