Saltar al contenido

¿Qué personaje de ‘La vuelta al mundo en 80 días’ eres?

¿Eres un viajero aventurero como Phileas Fogg, un astuto detective como el Detective Fix o un valiente periodista como Lady Kaveri? ¡Descubre qué personaje de La vuelta al mundo en 80 días 2021 eres haciendo nuestro divertido cuestionario! Haz clic en el botón de inicio a continuación para comenzar tu viaje alrededor del mundo.

Bienvenido al cuestionario: ¿Qué personaje de La vuelta al mundo en 80 días eres?

Sobre Around the World in 80 Days en pocas palabras:

«La vuelta al mundo en 80 días 2021» es una serie de televisión basada en la novela clásica de Julio Verne. El espectáculo sigue el viaje de Phileas Fogg, un rico inglés, y su leal sirviente Passepartout mientras intentan viajar por todo el mundo en solo 80 días. En el camino, se enfrentan a diversos desafíos y obstáculos, incluido un detective que cree que Fogg es un ladrón de bancos y un periodista que se une a ellos en su viaje.

Conoce a los personajes de La vuelta al mundo en 80 días

Phileas Fogg

Phileas Fogg es el tipo de personaje que mide el mundo con un reloj de bolsillo y una regla invisible, súper metódico y a la vez sorprendentemente impenetrable. Tiene esa calma británica que te hace pensar “nada le toca”, pero ojo, le gusta apostar (sí, al hombre le encanta una apuesta) y hay un puntito de misterio romántico que nadie espera. Parece siempre correcto, impecable y puntual aunque, curiosamente, una vez se enredó con un paraguas y perdió un tren — no es perfecto, y eso lo hace más real. Ah, y siempre huele a tabaco y a té; no sé por qué lo imagino con guantes blancos aunque a veces se quita uno para ser… humano.

Passepartout

Passepartout es la energía pura, el corazón en la maleta: leal hasta el extremo, torpe y brillante a la vez, siempre listo para resolver lo imposible con una sonrisa y una palabra tonta. Se mete en líos por entusiasmo —y por hambre— y luego te salva con una idea que nadie pensó, como si tuviera trucos en la manga y también en la panza. Es muy sensible, se ofende por tonterías y al rato está cantando en medio de la noche; le encanta dormir y a la vez es el primero en saltar. Y sí, a veces olvida nombres pero recuerda sabores de sopas de pueblos que nadie más notó, típico de él.

Abigail Fix

Abigail Fix tiene esa mezcla irresistiblemente moderna de curiosidad profesional y ternura personal; reportera con garra, no le da miedo meter la nariz en la historia y encima tiene sentido de humor. Es decidida, independiente y a veces demasiado directa, pero también tiene momentos de duda que la hacen humana, no un héroe de folletín. Lleva siempre una libreta destrozada y una taza de café que nadie sabe cómo sigue intacta, y aunque es escrupulosa en su trabajo, le encanta chismorrear (no lo digas muy alto). A veces se comporta como la mujer fuerte del siglo XIX y luego está llorando por una canción bonita, lo cual la hace adorable y real.

Nyle Bellamy

Nyle Bellamy es ese tipo encantador y algo peligroso que te hace creer que las reglas son sugerencias, no obligaciones; empresario con sonrisa fácil y secretos en los bolsillos. Tiene ambición, astucia y una brújula moral flexible —o flexible como la que se deja en la mesa cuando conviene—, y suele aparecer en el momento justo para complicar (y mejorar) las cosas. Habla bonito, promete mucho y cumple lo suficiente como para que te mantengas intrigado; a veces da la impresión de ser un héroe, otras veces, de ser un problema vestido. Curioso detalle: colecciona plumas estilográficas raras y odia la lluvia con pasión… aunque una vez bailó bajo ella, ya sabes, contradicciones.

Bernard Fortescue

Bernard Fortescue es el tipo de figura pública torpe pero entrañable, siempre con un sombrero mal puesto y una sonrisa de “yo no quería esto” que te gana. Es formal, algo burocrático, con nervios que lo traicionan en los peores momentos, pero si lo necesitas tiene principios de hierro —o al menos de hierro reciclado—. A veces parece que no puede con la aventura y luego sale con una solución tan improbable que te quedas mudo; tiene una astucia escondida bajo la timidez. Y sí, colecciona sellos y tiene fobia a las palomas, aunque en una fiesta le habló a una durante media hora —no preguntes, no tiene sentido.

Jane Digby

Jane Digby es espíritu libre, mujer de mundo y rompedora de expectativas; vive como si cada país le perteneciera un poco y cambia de pañuelo como cambia de idioma. Es seductora, valiente y totalmente desprejuiciada: le gustan las amantes aventuras, las cartas sin sellos y los atardeceres que no duran lo suficiente. Tiene un código propio que mezcla bordados, duelos y sonrisas demasiado largas; a veces parece casi mitológica, otras veces una amiga de riesgo que te arrastra a una fiesta. Curiosidad: ama los caballos y las recetas raras, y puede hablar tres idiomas y dos dialectos que inventó en el momento.

Niccolò Moretti

Niccolò Moretti es puro drama italiano en movimiento: gesticula mucho, tiene un pasado probable de artista o contrabandista (o las dos) y una risa que llena la habitación. Es romántico con lo teatral, apasionado hasta el exceso y un poco tramposo cuando la situación lo exige; también tiene un lado sorprendentemente leal que sale justo cuando menos te lo esperas. Ama la ópera, odia el té inglés y suele aparecer con historias que nadie puede verificar, pero que suenan tan bien que prefieres creerlas. A veces canta en voz baja mientras arregla un motor, lo cual no tiene sentido técnico pero sí mucho estilo.

Grayson

Grayson es el tipo serio, el pragmático al que le pasan todas las tareas duras: exmilitar, conductor, capitán —lo que haga falta—, siempre con la mirada de quien ya vio demasiado y aún así se ocupa. No es encantador en el sentido romántico, es funcional; pero ojo, detrás de ese ceño hay una lealtad gigantesca y un sentido del humor seco que pega fuerte cuando menos lo esperas. Es directo, eficiente y un poco gruñón, y suele tener una historia mala de la que nadie quiere saber pero que todos escuchan. Además, colecciona mapas con manchas de cerveza, un detalle que no pega con su cara de señor estricto pero ahí está, contradicciones everywhere.