Sobre Dave en pocas palabras:

«Dave» es una serie de comedia que se estrenó por primera vez en FX en 2020. Creada por y protagonizada por Dave Burd, también conocido por su nombre artístico Lil Dicky, la serie está vagamente basada en sus propias experiencias como rapero tratando de triunfar en la industria musical. Llena de humor ingenioso y un toque de surrealismo, «Dave» lleva a los espectadores en un viaje salvaje a través de los altibajos de la búsqueda de la fama de Dave, mientras también explora temas de amistad, identidad y auto-descubrimiento.

Conoce a los personajes de Dave

Dave

¡Dave es ese tipo que no puedes dejar de mirar cuando aparece en la habitación! Es brillante, torpe, obsesivo con la música y con una neurosis que a veces parece dirigir su carrera (y otras veces lo hunde, obvio). Tiene un ego raro que contrasta con una inseguridad casi infantil; es carismático y a la vez se tropieza con sus propias palabras, literal. Le encanta planear cosas enormes y luego se queda viendo memes por horas, y jura que solo bebe agua pero siempre tiene una lata de Red Bull escondida.

GaTa

GaTa es puro fuego y lealtad, el hype man que te arrastra con la energía aunque no quieras; amor incondicional al cuadrado. Sabe exactamente cuándo poner un beat, cuándo abrazarte y cuándo soltarte la verdad sin filtro (a veces demasiado brutal, pero funciona). Es increíblemente tierno en momentos raros —le puedes ver arreglando su peinado con la misma seriedad que medita— y también es un tipo con códigos antiguos, orgulloso y sensible. Ah, y siempre tararea una canción que nadie más conoce, jura que es un hit perdido de los 90.

Mike

Mike es ese amigo práctico que te mantiene con los pies en la tierra (o te saca del lío según el día). Tiene cara de “sé lo que hago” aunque a veces parece el que menos entiende la fama y más disfruta las comidas baratas, raro contraste. Es de los que hacen llamadas incómodas por ti y después se arrepienten de la forma en que lo hicieron; noble pero con humor seco. A veces habla como si tuviera todo controlado, otras veces se olvida de dónde dejó las llaves por tres días seguidos —humanísimo.

Ally

Ally es complicada en el mejor sentido: tiene principios, no se deja impresionar fácil y a la vez tiene una sonrisa que todo lo suaviza. Inteligente, mordaz, y con una paciencia que a veces parece límite (luego explota, claro). Puede ser súper cariñosa y al rato da una lección con tono de profesora —y ambos lados son adorables/conflictivos. Guarda post-its por toda la casa con ideas, y jura que nunca rompe una promesa, aunque sí pierde el paraguas casi siempre.

Elz

Elz es el tipo creativo que siempre tiene una anécdota rara en el bolsillo; la persona con ideas locas y un talento natural para mezclar cosas —música, voces, chistes, lo que sea—. Es excéntrico pero con un sentido del timing perfecto; me encanta cómo entra en la habitación como si fuera un personaje de película, y luego se pone a lavar platos como si nada. Tiene un ego pequeño que alimenta con sarcasmo y una generosidad enorme (confuso, lo sé). Duerme poco, colecciona camisetas de bandas poco conocidas y a veces habla en metáforas que nadie entiende hasta que de repente sí.

Emma

Emma parece tranquila pero te atraviesa con una mirada, no es obvio y eso la hace más peligrosa en el buen sentido. Es dulce cuando quiere, contundente cuando debe, y tiene esa calma que desarma discusiones —aunque en el fondo le encanta pelear por cosas pequeñas, tipo quién dejó la luz encendida. Muy protectora con su gente y también un poco misteriosa, guarda secretos que a veces ni ella misma recuerda por qué los empezó. Lleva siempre un lápiz detrás de la oreja (o eso cree), y dice que no le gustan los reality shows pero se los ve a escondidas: pura contradicción encantadora.

Carol

Carol es esa mezcla de madre guerrera y fan número uno; te abrasas con su amor y te confundes con su forma de decir verdades. Puede ser cariñosa hasta el extremo y al minuto te lanza una frase que te deja pensando tres días. Es práctica, tiene anécdotas de época para todo y cocina como si la comida arreglara universos (a veces arregla, a veces no). Tiene una taza favorita que rompe cada dos años pero se niega a reemplazarla, obsesión adorable.