Sobre The Office en pocas palabras:

» The Office » es una popular serie de televisión de estilo mockumentary que representa las vidas humorísticas y a menudo absurdas de los empleados que trabajan en la sucursal de Scranton de la compañía papelera Dunder Mifflin. Ambientada en el corazón del lugar de trabajo estadounidense, el programa captura bellamente las peculiaridades y dinámicas de la vida en la oficina a través de sus personajes adorables y excéntricos. Dirigida por el torpe gerente regional Michael Scott, la serie profundiza en las pruebas y tribulaciones cotidianas de la política de oficina, los romances y las peculiaridades. Con una mezcla perfecta de humor, corazón y situaciones relacionables, » The Office » ha obtenido una base de fans devotos y sigue siendo una comedia de situación querida que continúa trayendo risas a las audiencias de todo el mundo.

Conoce a tus enemigos mortales en la oficina

Michael Scott

Michael es ese jefe que te hace reír y te hace taparte la cara al mismo tiempo; totalmente convencido de que es el alma de la oficina (y del mundo). Quiere ser amado, organiza actividades rarísimas y tiene un mug de «World’s Best Boss» que no deja de usar, aunque probablemente lo compró él mismo. A veces tiene destellos de sabiduría absurda y a veces es un desastre social que dice lo peor en el peor momento — pero de alguna manera su corazón está allí. Creo que también colecciona corbatas horribles y sabe demasiadas frases de películas, no sé si eso lo ayuda o lo empeora.

Dwight Schrute

Dwight es una fuerza de la naturaleza: intenso, leal hasta el extremo y totalmente extraño en formas entrañables y aterradoras. Agricultor de remolachas, autoproclamado «Assistant to the Regional Manager» (no aceptes el título, él no lo hará), vive por reglas, entrenamientos de supervivencia y una pasión inexplicable por la disciplina. Tiene miedo de todo y a la vez puede planear una defensa contra un apocalipsis; guarda armas, mapas y tal vez un par de bichos raros en el escritorio. A ratos parece no tener hobbies y a ratos te habla de karate, dálmatas y el tamaño exacto de su armadura medieval — no es consistente, pero funciona.

Kelly Kapoor

Kelly es drama, brillo y una obsesión vital por las celebridades; si algo tiene estilo y cotilleo, ella ya lo sabe y lo vivió. Habla sin parar, cambia de trabajo/relación/estado de ánimo con la velocidad de un GIF, y siempre parece tener el outfit perfecto (aunque a veces contradice su propia historia sobre «solo gustos simples»). Está enamorada de la cultura pop y de sí misma en cantidades casi artísticas; también manipula sutilmente con sonrisas y mensajes de texto pasivo-agresivos. A veces dice que quiere independencia y al minuto siguiente necesita que la rescaten emocionalmente — adorablemente confusa.

Ryan Howard

Ryan es el chico que empezó como «temp» y creyó que el mundo era suyo; ambicioso, astuto, a veces pomposo y a veces simplemente perdido. Se presenta como emprendedor moderno, genio de tecnología, pero luego comete errores enormes y pareciera que se le olvida ser honesto consigo mismo (y con los demás). Tiene esa mezcla de indiferencia y necesidad de aprobación que te irrita y te intriga; puede ser encantador y luego fríamente calculador. Oh, y siempre está metido en la próxima gran idea que probablemente fallará, pero hey, entusiasmo no le falta.

Angela Martin

Angela es el epítome del control moral (según ella) — rígida, conservadora, amante de los gatos y de las reglas escritas y no escritas. Estricta hasta el extremo en el trabajo, con un club secreto de estándares personales que nadie entiende del todo, pero… spoiler: tiene una vida emocional complicada y contradicciones enormes. Se queja del ruido y del desorden pero a veces se involucra en chismes intensos y en romances clandestinos que nadie vio venir. Tiene una colección de tazas de té y fotos de gatos, y jura que su café nunca se enfría aunque claramente sí.

Creed Bratton

Creed es un misterio ambulante: cada línea es un acertijo y cada gesto dispara teorías sobre su pasado (posiblemente oscuro, posiblemente ridículo). Hace comentarios random que rompen la realidad y nadie sabe realmente a qué se dedica salvo que su cultura general es… inquietante. A veces parece no saber qué día es, otras veces afirma haber sido muchas cosas (músico, fugitivo, superviviente) y tú te lo crees porque su actitud no admite réplica. Guarda cosas extrañas en el cajón, come cosas dudosas en su escritorio y probablemente tiene un plan B ilegal, o B y C, no sé.

Stanley Hudson

Stanley es la calma imperturbable con cara de “si me hablas me arruinas el día”; su prioridad absoluta es el crucigrama y el retiro planeado desde 1993. Todo lo que tenga que ver con trabajo extra le parece una ofensa personal y solo espera el día de las pretzels con fervor religioso. Es sarcástico, seco y a veces sorprendentemente competitivo cuando algo le importa (sí, cuando algo le importa, que es raro). Duerme con los ojos abiertos durante reuniones y tiene esa vibra de “no me molestes” que secretamente todos respetan.

Andy Bernard

Andy es energía ansiosa con una reserva infinita de canciones y apodos; canta, hace a capella, habla de Cornell cada dos frases y aún así a veces parece que no se sostiene. Muy necesitado de aprobación, se esfuerza por caer bien y por ser ese compañero simpático que cuenta historias — que pueden volverse un poco dramáticas. Alterna entre confianza desbordante y colapso emocional, lo que lo hace impredecible pero también sorprendentemente adorable. Lleva un banjo, guarda listas de nombres cursis para todo y llamará «Nard Dog» a quien sea en el momento menos oportuno.

Deangelo Vickers

Deangelo es el jefe que aparece con demasiado entusiasmo y con cero filtro para saber lo que realmente necesita la oficina; quiere ser amigo de todos y al mismo tiempo imponer una vibra “cool”. Hace bromas raras, organiza actividades incómodas y tiene la sonrisa de alguien que ensayó en el espejo — bueno, porque probablemente la practicó. Intenta modernizarlo todo pero a menudo termina siendo más extraño que útil; es como un intento noble de liderazgo que se cae a pedazos de forma épica. Tiene un bigote o barba que no sabes si es intencional y colecciona posters motivacionales que nadie pidió.

Gabe Lewis

Gabe es el tipo de corporativo que trae una lista de reglas y música indie que nadie pidió; obediente a la jerarquía y un poco fuera de lugar socialmente. Se presenta como “el moderno” del grupo, con playlists raras y fechas de lanzamiento de apps en la lengua, pero en el fondo quiere aprobación y teme al rechazo. Es controlador en lo pequeño (micromanagea) y sorprendentemente vulnerable en lo grande; intenta ser la voz de la empresa pero sufre cada mirada crítica. Tiene agendas digitales impecables, una risa incómoda y esa necesidad de ser percibido como sofisticado que a veces resulta hilarante.