¿Qué personaje de Domina eres tú?
¿Eres fanático de la antigua era romana y la intriga política que la acompaña? ¿Te sientes atraído por los personajes poderosos y astutos que habitan en el mundo de Domina? ¡Realiza este cuestionario para descubrir qué personaje de Domina encarnas! ¿Serás la feroz y determinada Livia Drusilla, el ambicioso y calculador Gaius Germanicus, o alguien completamente diferente? Haz clic en el botón de inicio a continuación para comenzar tu viaje y descubrir quién eres realmente en el mundo de Domina.
Sobre Domina en pocas palabras:
Domina es una serie de televisión de drama histórico que sigue la vida de Livia Drusilla, la poderosa e influyente esposa del Emperador Romano Augusto. Ambientada en la Antigua Roma, la serie explora el mundo de la política, el poder y la corrupción que definieron esta época. La serie representa el ascenso al poder de Livia, desde una joven en un mundo dominado por hombres hasta convertirse en una de las mujeres más poderosas y temidas del Imperio Romano. Con sus impresionantes visuales, cautivadoras tramas y talentoso elenco, Domina es una serie que todo amante de la historia o del drama debe ver.
Conoce a los personajes de Domina
Livius
Livius es ese tipo que parece tranquilo hasta que de repente no lo está y te pega una sorpresa, ¿sabes? Inteligente, resistente y con una rabia contenida que a veces sale en formas raras —como coleccionar piedras imposibles o hablar con las plantas— no lo juzgues. Tiene principios bastante firmes pero también un sentido del humor que aparece en los peores momentos, lo que lo hace adorablemente contradictorio. A veces actúa como si todo fuera un plan milimétrico y al minuto siguiente improvisa como un loco; no sé si eso es genio o pura suerte, pero funciona.
Tycho
Tycho es el soldado serio que secretamente cuida de todos, el tipo que llega tarde pero trae soluciones, siempre con esa mirada de “ya lo arreglé” aunque no lo haya hecho. Firme, leal y con una moral un poco rígida que, sorpresa, a veces se derrite por pequeñas cosas tontas —una canción, un perro, una receta quemada—. Es práctico hasta decir basta y tiene maneras bruscas que esconden una ternura incómoda; no te confundas, es peligroso tanto en batalla como en una discusión familiar. Si te lo imaginas con una taza de té a las tres de la mañana es porque probablemente lo haya hecho en algún momento, lo juro.
Libo
Libo es el tipo encantador que todo el mundo subestima hasta que hace algo sofisticado y te deja boquiabierto, tipo poeta con espada (literal o figurada). Hábil con las palabras, manipulador en el buen sentido y con una curiosidad que lo mete en líos gloriosos; colecciona frases y secretos como si fueran fichas de un juego. Tiene una sonrisa que engaña y unos caprichos raros —como escribir notas a mano que nunca envía— que lo hacen misterioso y adorable a la vez. No siempre sabes si es sincero, y a veces ni él lo sabe, pero carismáticamente caótico es poco.
Livia Drusilla
Livia es puro fuego frío: calculadora, ferozmente ambiciosa y con esa calma que asusta, sí, asusta de verdad. Es política nata, mueve piezas en silencio y sonríe mientras te gana la partida, pero ojo, también tiene momentos de vulnerabilidad que salen de la nada y te dejan pensando “ay, pobre” por un segundo. Le gustan los detalles —joyas, gestos, olores— y tiene una intuición que casi parece sobrenatural; a veces utiliza un vestido para anunciar una guerra, literal o simbólicamente. Es la clase de persona que puede perdonarte y castigarte al mismo tiempo, solo porque puede, y eso la vuelve irresistible y peligrosa.
Antigone
Antigone es la rebelde con una causa, la que grita cuando los demás susurran y se lanza al fuego por principios que a veces son contradictorios pero siempre auténticos. Idealista, valiente y a la vez un poco trágica —como si llevara un drama griego en el bolsillo—, tiene una integridad que sorprende en tiempos turbios. Le gusta escribir, a veces en servilletas, y tiene manías teatrales como remover el cabello cuando está pensando en conspiraciones. No siempre gana, y a veces actúa sin calcular las consecuencias, pero eso solo la hace más humana y, sí, molona.
Scribonia
Scribonia es un enigma encantador: maternal en apariencia pero con un filo afilado si la traicionas, y con gustos extraños tipo coleccionar tazitas rotas. Tiene una habilidad para leer a la gente que da miedo, y usa esa habilidad tanto para proteger como para manipular —todo depende del día—. Es práctica, resiliente y tiene un sentido del sarcasmo que aparece en los momentos más inoportunos, lo que la hace honestamente maravillosa. A veces parece un poco dispersa (pone el vino en la nevera, por ejemplo) y otras veces es la persona más metódica de la sala; mezcla de caos y orden, y funciona.
Gaius
Gaius es el consejero cansado que aún así tiene las mejores ideas a las tres de la mañana; sabe demasiado y a menudo lo guarda como quien guarda una receta secreta. Es leal, con una ética complicada y un pasado que lo persigue en pequeñas manías —fumarse un cigarro fingido, tararear una canción infantil—, cosas que lo humanizan y lo vuelven tierno sin querer. Tiene una paciencia inmensa, pero si lo llevas al límite, cuidado: su venganza es fría y meticulosa; no es ruidosa, es precisa. A veces habla en metáforas y otras veces no puede dejar de decir lo obvio, contradicción clásica de personaje sabio.
Julia
Julia es fuego joven con una agenda propia, imprevisible, cariñosa y a la vez absolutamente aterradora cuando se enfada —es decir, impresionante. Tiene una risa que puede arreglar una habitación y unos caprichos impulsivos (comprar cosas inútiles a medianoche, enviar cartas dramáticas) que la hacen irresistiblemente humana. Es ferozmente leal a los suyos y ferozmente egoísta con sus deseos, lo que la convierte en una mezcla preciosa de contradicciones. A veces parece frívola y otras veces da lecciones de vida sin proponérselo; esa dualidad es lo que la hace inolvidable.

Isabella es un espíritu creativo con un don para encontrar significados más profundos en las historias que amamos. Como creadora de cuestionarios dedicada, le fascinan los arcos de los personajes y cómo reflejan la vida real. Sus cuestionarios están diseñados para dar a las personas una visión de quiénes son, conectándolos con los héroes, villanos y compañeros de las series favoritas. Cuando no está trabajando en cuestionarios, a Isabella le encanta discutir giros de la trama con amigos y sumergirse en teorías de los fans.